jueves, 3 de julio de 2014

Oficina Regional de la FAO para América Latina y el Caribe

 

Agricultura Familiar

Se entiende por Agricultura Familiar a la producción agrícola, pecuaria, forestal, pesquera y acuícola que, pese a su gran heterogeneidad entre países y al interior de cada país, posee las siguientes características principales:
  • Acceso limitado a recursos de tierra y capital,
  • Uso preponderante de fuerza de trabajo familiar, siendo el(la) jefe(a) de familia quien participa de manera directa del proceso productivo; es decir, aún cuando pueda existir cierta división del trabajo, el(la) jefe(a) de familia no asume funciones exclusivas de gerente, sino que es un trabajador más del núcleo familiar,
  • La actividad agropecuaria/silvícola/pesquera/acuícola es la principal fuente de ingresos del núcleo familiar, que puede ser complementada con otras actividades no agrícolas que se realizan dentro o fuera de la unidad familiar (servicios relacionados con el turismo rural, beneficios ambientales, producción artesanal, pequeñas agroindustrias, empleos ocasionales, etc.).
La FAO se ha propuesto el siguiente objetivo de cooperación para la agricultura familiar:


Colaborar con los países de América Latina y el Caribe en la formulación y adopción de políticas y programas para aumentar la producción de bienes y servicios provenientes de la Agricultura Familiar de manera sostenible y, con ello, contribuir al bienestar de las familias rurales de la Región.
Para ello se trabajará en los siguientes ejes:

Análisis socioeconómico, de género, juventud rural y de políticas
Mediante la investigación aplicada a la Agricultura Familiar, se identifica el nivel de eficiencia y rentabilidad de los sistemas de producción en la Agricultura Familiar, y sus factores determinantes, así como cuellos de botella en toda la cadena, presentando propuestas concretas para superarlos y así mejorar la competitividad de los agricultores familiares. Estos análisis, que incluyen también el enfoque de género y juventud rural para su arraigo en los territorios, son la información base para la formulación de políticas diferenciadas.
La FAO contribuye al análisis al análisis socioeconómico, de género, juventud rural y de políticas trabajando en las siguientes áreas de colaboración:

  • Fortalecimiento de capacidades a nivel nacional, regional y local para el desarrollo de análisis socioeconómico y de género de sistemas productivos de Agricultura Familiar, aplicando metodologías como Matriz de Análisis de Políticas (MAP) y Análisis Socioeconómico y de Género (ASEG), así como herramientas e indicadores para realizar diagnósticos de la situación del empleo rural.
  • Capacitación y análisis de flujos comerciales y márgenes de comercialización que impactan la competitividad de la Agricultura Familiar.
  • Análisis participativos con grupos en desventaja y sus organizaciones.
  • Contribución para que la Agricultura Familiar y la economía rural informal se incluyan en análisis, incluyendo líneas de base de proyectos, evaluaciones de impacto, etc.
  • Realización de diagnósticos a nivel nacional que permitan identificar, a nivel general, el potencial y principales limitantes de la Agricultura Familiar como uno de los insumos para definir prioridades y estrategias de apoyo en las políticas públicas.
Acceso a mercados e inclusión en cadenas de valor
Trabajando con autoridades de gobierno, agentes de comercialización, procesadores y organizaciones de productores, la FAO colabora en la identificación e implementación de mecanismos que permitan hacer la comercialización interna más eficiente y transparente con precios justos, para así mejorar la capacidad de las explotaciones familiares en el abastecimiento de los mercados locales y nacionales a través del desarrollo de canales de comercialización alternativos, fomento de mercados institucionales y compras locales para los programas sociales de alimentación y la creación de alianzas productivas en las cadenas de valor. FAO trabaja en:

  • Elaboración de estudios sobre los modelos y propuestas de inserción de la Agricultura Familiar en los mercados agroalimentarios.
  • Fortalecimiento de capacidades de los pequeños productores (capacidades empresariales, elaboración de proyectos de inversión, calidad e inocuidad, etc.) y apoyo al establecimiento de alianzas productivas entre los diferentes actores de la cadena de valor (pre-producción, producción, transformación, comercialización, compradores y consumidores).
  • Reconocimiento de productos diferenciados, mediante un sello social de Agricultura Familiar.
  • Fortalecimiento de capacidades de los funcionarios públicos y programas de apoyo a la Agricultura Familiar (capacidades empresariales, elaboración de proyectos de inversión, calidad e inocuidad, etc.).
  • Desarrollo y fortalecimiento de mercados institucionales y compras locales de la Agricultura Familiar vinculadas a los programas sociales de alimentación.
  • Fortalecimiento de la organización para la comercialización en los diferentes mercados.
  • Mejora de la competitividad de los mercados tradicionales locales (ferias libres, ferias especializadas, mercados sobre ruedas, tianguis, etc.), como un canal importante de comercialización de productos alimenticios saludables provenientes de la Agricultura Familiar.
  • Desarrollo de sistemas de información de mercados.
  • Fortalecimiento de capacidades de gestión asociativa y de negociación en los mercados.
  • Fomento de la inclusión de los productos de la Agricultura Familiar en el comercio regional.
  •  
Intensificación sostenible de la producción familiar
La FAO apoya la formulación e implementación de políticas, programas, proyectos, tecnologías, intercambios de experiencias y mejores prácticas de gestión del conocimiento y estudios de caso que promuevan:
  • El uso, conservación e intercambio de un conjunto genéticamente diverso de variedades mejoradas de cultivos, así como de variedades nativas y semillas locales, que sean adecuadas para múltiples agro ecosistema y prácticas agrícolas y resistentes al cambio climático.
  • El uso de sistemas de tecnologías de riego más inteligentes, de precisión, y prácticas agrícolas que utilicen enfoques ecosistémicos para conservar el agua.
  • La importancia de suelos sanos, aprovechando las fuentes naturales de nutrientes para las plantas y empleando los fertilizantes minerales de manera racional. Así también, el empleo de prácticas como la labranza mínima y cubierta vegetal del suelo.
  • Un mejor manejo pos cosecha y la agro industrialización de residuos.
  • El desarrollo y fortalecimiento de modelos de extensión agrícola con enfoques de autogestión para el desarrollo comunitario que refuercen las habilidades y destrezas técnicas, organizacionales y de gestión de la AF, como las escuelas de campo para agricultores, fincas Integrales didácticas, vitrinas tecnológicas, huertas familiares y escolares, y las agencias de desarrollo rural del modelo PESA-México, empoderando a los productores líderes como promotores / agentes de extensión, y facilitando el acceso a conocimiento, información y tecnologías.
  • Una agricultura productiva que conserva y mejora los recursos naturales bajo un enfoque ecosistémico.
  • El fortalecimiento de los sistemas de extensión agrícola con enfoques de autogestión para el desarrollo comunitario.
  • El manejo Integrado de Plagas y Enfermedades en la Pequeña Agricultura.
  • El manejo sostenible de sistemas pecuarios familiares, y de sistemas agroforestales, agro-acuícolas y silvopastoriles.
  • La actividad productiva con carbono neutro.
  • Desarrollo de programas de agricultura urbana y periurbana.

 

Enlace: 
01 Mar. 2014

No hay comentarios:

Publicar un comentario